Si hay algo que destaca en Ares, es la riqueza de su patrimonio natural: del verde de los paisajes de interior al amarillo de las playas y el azul de nuestra ría. La naturaleza sigue siendo uno de esos elementos que singularizan a la villa y que la convierten en un punto de referencia en la práctica turística y de deportes náuticos.
Y en la planificación deportiva que hace el Ayuntamiento en este período estival, ¡el mar para nada queda atrás! Las sesiones de kayak y paddlesurf, el contacto con la arena con el vóley, las actividades de los campamentos urbanos en las playas y en los parques… todo camina que reivindicar el increíble valor de los espacios naturales que tenemos alrededor.
Para vivir Ares, no hay nada mejor que coger la pala y la mochila, como hace la chavalada del VeraneAres Deportivo, y ¡echarse a explorar!