Los Ayuntamientos de Ares y Mugardos celebran el 7 de junio la tradicional Romería Voto de Chanteiro

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La Romería, que no se celebra desde 2019, se desarrollará durante todo el día y, además de la Misa, habrá reparto de empanadas y bebidas, así como la actuación de la Agrupación de Gaitas de Ares

Como en años anteriores, se fletarán autobuses para recoger a los vecinos que lo deseen y recorrerán los dos municipios en horario de mañana y tarde.

Los Ayuntamientos de Ares y Mugardos organizan las celebraciones de la tradicional romería del Voto de Chanteiro, que tendrá lugar el martes 7 de junio, después de no celebrarse desde 2019 por la situación de pandemia.

En esta ocasión, como en ediciones anteriores, se fletarán autobuses que recorrerán los dos municipios para recoger y dejar a los vecinos que lo deseen.

Según el programa presentado por las Concejalías de Cultura de los dos municipios, los autobuses partirán a las 10.30 horas, realizando, en el caso de Ares, el recorrido por Pedregal, Pezoas, Seselle, Porta do Sol, Lubre, Cervás y Chanteiro, y Mugardos, por San Xoán de Piñeiro, O Seixo, Franza, A Pedreira y Mugardos. Estos autobuses volverán a las 14:00 horas y de nuevo a las 19:00 horas.

Este día se llevarán a cabo las actividades habituales, como la actuación del Grupo de Gaitas de Ares para amenizar la romería, coincidiendo con el reparto de empanadas y bebidas a los asistentes, tras la celebración de la Misa a las 12.00 horas.

Desde las Concejalías de Cultura de Ares y Mugardos, sus responsables, Alma Barrón y Begoña Roldós, han destacado la importancia de retomar una de las tradiciones más arraigadas para Ares y Mugardos, “esperar ver la ermita de Nuestra Señora de la Merced llena de romeros y peregrinos disfrutando y viviendo intensamente esta celebración”.

La romería del Voto de Chanteiro reúne cada año en torno a la Ermita da Mercé a cientos de personas, la mayoría procedentes de Ares y Mugardos y también llegadas de distintos puntos de la comarca. La tradición se remonta al siglo XV cuando una peste asoló Ferrol y la comarca y, según la creencia, el episodio acabó gracias a la intervención de la Virgen. Desde entonces, la ofrenda se ha venido celebrando cada año, dando paso a otra parte del día más festiva y lúdica.

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